POEMAS IBÉRICOS (13)LAURA GIORDANI
Laura Giordani (1964, Córdoba, Argentina). Escritora, poeta y profesora de lengua inglesa. Desarrolla actividades docentes e imparte talleres y seminarios en torno a la escritura poética y los procesos de creación artística. Ha participado en lecturas, conferencias y seminarios en España y Argentina. Actualmente reside en España. Como poeta ha publicado “Materia Oscura” (2010, Baile del Sol), “Noche sin Clausura” (2012, Ediciones Amargord), “Antes de desaparecer” (2014, Ediciones Tigres de papel), “Una lengua impropia” (2014, Ediciones del 4 de Agosto, Planeta Clandestino) “La infancia que nos aguarda” (2016, Ejemplar Único, Colección Poética y Peatonal), "Manca terra" (2020, La Garúa Ediciones) y las plaquettes “Celebración del brote” (2009, Zahorí-Poesía en minúsculas), “Las varas del zahorí: poemas de la sed” (2013, Fundación Inquietudes) y "Monte adentro [imantaciones]"(2018, Las hojas del baobab). Ha participado también en muchas antologías como “Disidentes: Antología de poetas críticos españoles” (La Oveja Roja, 2015), “Exploradoras” (Libros de la herida, 2015), “Naciendo en otra especie” Antología de Poesía de Capital Animal (2016, Plaza &Valdés), “Árbol de Alejandra” (Karima Editora, 2019).
Página personal:
|
Blog autora: |
ANAHATA.
INCLINARSE NIÑA ADENTRO
[23º 17’]
Tu mano pajarito sin peso
–ese peso insoportable de lo limpio-
entre mis manos:
las ahueco hasta la inclinación
precisa
de nuestra infancia.
Mira cuánta sal en los dedos
por no haber dicho a tiempo lágrima.
Me miro en tus ojos-míos
mis ojos-tuyos:
agüita de charco recién llovido
menta arrancada del corazón.
Espacio y tiempo colapsan
en nuestro abrazo
– trapito tibio para tanta pérdida desde que dejé este patio.
Vengo desde nuestro futuro
a ahuyentar la nostalgia:
malsana arboleda floreciendo adentro
jilguero reseco que todavía canta
[Verás cómo respiran los eucaliptos del monte
sin miedo].
Niña que se quedó esperando
en un pliegue del miocardio:
no más pájaros muertos camino a la escuela
en tu garganta la extraña ave
que me des-cor-rompe
-molécula a molécula-
y agujerea con su vuelo este falso cielo.
Dame lo intacto
el barro primero
habla un lenguaje que no sea adquisición:
palabras-lepra-de-lo-vivido
ajena todavía a esta violencia
adulta de nombrar.
Canta la canción olvidada
su rosado definitivo
como cicatriz del vientre
o la marca de agua
en la fachada de la casa.
Tiempo de cerrar los ojos
tiempo de escribir con tus manos
– atorada de pájaros y pétalos –
decir:
estoy perdida
regreso con la afasia de los recién perdonados.
Ya no recuerdo cómo partir el Uno en pronombres.
[23º 17']
-esse peso insuportável do limpo-
entre as minhas mãos:
Eu coloco-as na inclinação precisa
por não ter dito a lágrima a tempo.
os meus olhos - os teus:
poça de água acabada de chover
hortelã arrancada do coração.
no nosso abraço
- pano morno para tanta perda desde que deixei este pátio.
para afugentar a saudade:
um bosque insalubre a florescer para dentro
pintassilgo ressequido que ainda canta
[Verás como respiram os eucaliptos na montanha sem medo].
numa dobra do miocárdio:
não mais pássaros mortos no caminho da escola
na tua garganta o pássaro estranho
que me des-cor-rupta
-molécula a molécula
e perfura com o seu voo este falso céu.
Dá-me o que está intacto / a lama primeiro
fala uma linguagem que não é aquisição:
palavras-lepra-da-vida
alheias ainda a esta violência
adulta de nomear.
o seu rosa definitivo
como uma cicatriz no ventre
ou a marca de água
na fachada da casa.
tempo de escrever com as mãos
- cheias de pássaros e pétalas
estou perdida
regresso com a afasia dos recém-perdoados.
En "Manca Terra", La
Garúa Ed, 2020
[Poesía]
Como
uno de esos ángeles de Wenders, acerca su oído a nuestra espalda para auscultar
el llanto no llorado como quien pega una caracola vacía a su oído para oír el
mar ausente.
Cuando
todos se han marchado de la casa y ya está colgado el cartel “Se vende”, ella
se queda a hablar con las voces remanentes, los ecos refugiados en las macetas
en las que apenas sobreviven los helechos. A observar cómo las migas son
transportadas por hormigas rojas a una hierba que nadie riega y deberá esperar
la próxima lluvia.
Todavía
puede oír al niño que cayó al pozo prendado por el fulgor del agua.
Ella
se queda a repasar si queda algo en los cajones mal cerrados o si alguien sigue
respirando aún entre las cenizas de una urna.
[Poesia]
Como um desses anjos de Wenders, ela aproxima o ouvido às
nossas costas para escutar o pranto não chorado, como quem encosta um búzio
vazio ao ouvido para ouvir o mar ausente.
Quando toda a gente já saiu de casa e o cartaz
"Vende-se" foi pendurado, ela fica para falar com as vozes que
restam, os ecos abrigados nos vasos onde os fetos mal sobrevivem. Para ver como
as migalhas são transportadas pelas formigas vermelhas para uma relva que
ninguém rega e que terá de esperar pela próxima chuva.
Ela consegue ainda ouvir a criança que caiu no poço,
cativada pelo brilho da água.
Ela fica para verificar se sobrou alguma coisa nas
gavetas mal fechadas ou se alguém ainda respira nas cinzas de uma urna.
Inédito, 2023
Traducción de SAL. Revisión de Manuel Silva-Terra, 202
Comentarios
Publicar un comentario